La mujer que quiere ser Barbie

Lo que debía ser un juego terminó convirtiéndose en una obsesión. Al punto que decidió modificar su fisonomía solo para verse como "Barbie", la muñeca con la que jugó de chica.

La historia de Blondie Bennett puede sintetizarse como la mujer que quiso ser como Barbie. Tanto que lleva gastados unos 30 mil euros en cinco operaciones de busto, sin contar lo que cuesta rellenarse los labios, inyectarse bótox y broncearse regularmente con sprays.

Aunque el punto más alto al que esta mujer se propuesto llegar es entrenarse para ser menos inteligente. Para ello, inició sesiones de hipnosis para, según dicen, empezar a sentirse tonta y confundida todo el tiempo.

Su transformación comenzó en la adolescencia, cuando comenzó a vestirse como la famosa muñeca, cambió el color de cabello y hasta se compró el mismo auto que conducía su heroína.

Sin embargo, cuando quiso acordarse, estaba llevando "una doble vida" y sin dudarlo decidió "convertirme de una vez por todas en una Barbie e ignorar todo lo que la gente decía sobre mí"