Cavallo defendió la reducción de subsidios que implementó el Gobierno

Domingo Cavallo

El ex ministro de Economía Domingo Cavallo consideró hoy "positiva" la reducción de subsidios al consumo de gas y agua anunciada por el gobierno, aunque advirtió que impactará negativamente "en el poder de compra" de la gente.

"Haber comenzado a reducir los subsidios y actualizar las tarifas también es positivo. Va a tener un impacto negativo en el poder de compra de la población, especialmente de aquella que sea más afectada por el incremento tarifario. Pero éste es un costo social que ya está devengado y es inevitable. Mientras más se lo demore, más doloroso resultará", planteó.

A su criterio, "lo que anunciaron no es muy claro y aparentemente es insuficiente" pero "es positivo que hayan decidido comenzar a pagar el costo político que este tipo de ajuste siempre significa".

Asimismo, en un artículo publicado en su blog, el economista afirmó que el gobierno "no está en condiciones" de "inaugurar un buen plan de estabilización que reduzca significativamente la inflación" por falta de "credibilidad".

"El margen de maniobra que el gobierno tiene para evitar un costo recesivo excesivo y que no se produzca una explosión tipo "Rodrigazo" es escaso, sobre todo por falta de credibilidad y por las inconsistencias entre el discurso y la acción. El gobierno de Cristina no está en condiciones de pegar con éxito un viraje de 180 grados e inaugurar un buen plan de estabilización que reduzca significativamente la inflación", planteó Cavallo en su blog.

Según su visión, "esto es algo que recién tendrá la posibilidad de hacer un nuevo gobierno que goce de credibilidad y que comience con un discurso opuesto al que caracterizó al gobierno de los Kirchner".

De todos modos, destacó que "dentro del escaso margen que tiene, vale la pena reconocer que algo están haciendo" en referencia al aumento de las tasas que pagan por las LEBACs, lo cual "ayuda a tranquilizar el mercado cambiario".

A su vez, manifestó que "es razonable que hayan decidido dejar de mentir con las estadísticas, tanto en materia de inflación como de crecimiento del PBI", aunque criticó que no se hizo "de manera suficientemente prolija".

"Por supuesto que fue un gran error haber alentado una sobre-valuación de los cupones de PBI con estimaciones que claramente exageraban el crecimiento. Pero los operadores en los mercados deberían haber tenido en cuenta este riesgo, porque no es, ni más ni menos, que el reverso de lo que ocurrió con el precio de los bonos ajustables por CER", expresó.

Destacó que "desde el punto de vista del manejo macro-económico, no tener que pagar el cupón de PBI este año, libera reservas para poder avanzar en la normalización de la deuda con el Club de París y, eventualmente, con los hold-outs", lo cual "facilitaría el acceso de Argentina al mercado internacional de capitales a tasas razonables".

Por otra parte, advirtió que "la conflictividad social alrededor de las negociaciones colectivas es también inevitable".

"Es entendible que los sindicatos pretendan aumentos no menores al 30 %, porque la inflación se proyecta más cerca del 35 % anual que del 25% del que hablaba informalmente el gobierno hasta antes de la devaluación de enero. Pero es positivo que se esté arribando a algunos acuerdos",