Paritarias: provincias quedan atadas a la pauta nacional

KICILLOF PIDIÓ A LAS PROVINCIAS NO DAR MÁS DE 25% DE AUMENTO

La línea que bajó la Casa Rosada a los gobernadores afines, entre ellos el bonaerense Daniel Scioli, es muy clara: deben proponer un aumento salarial con techo en el 25% en la ronda de negociaciones paritarias que ya comenzó a desarrollarse en la mayoría de los distritos. En primera instancia, los mandatarios buscarán cerrar un acuerdo con los sindicatos docentes, aunque el panorama asoma conflictivo. Las diferencias no pasarían tanto por el porcentaje del incremento -los gremios accederían a firmar por el 30%- sino por la forma en que se otorgaría, de acuerdo a la propuesta oficial. Según pudo saber este medio, el ministro de Economía, Axel Kicillof, pidió con cierto énfasis a sus colegas provinciales que el aumento se consume en tres cuotas, la primera en marzo y las dos restantes en junio y octubre.

AYUDA FINANCIERA

Como contraprestación, Kicillof habría ofrecido ayuda financiera de la Nación a las Provincias para saldar la tercera cuota del aumento en octubre próximo, ante la advertencia de los ministros de algunos distritos de que no estaban en condiciones ni siquiera de ofrecer un 25%. Por caso, el Gobierno de la provincia de Río Negro acaba de proponer a los estatales locales un aumento de sólo el 20%.

De acuerdo a las fuentes consultadas por este diario, entre los que recibieron el mensaje de Kicillof estuvo la ministra de Economía bonaerense, Silvina Batakis, quien viene coordinando las reuniones con sus colegas.

Aunque varias provincias ya anunciaron que se moverán de acuerdo a criterios propios a la hora de negociar con los gremios, como Córdoba, Santa Fe, San Luis y Corrientes.

Las negociaciones paritarias con los empleados estatales, judiciales, docentes y el personal de la salud pública se desarrollan en un escenario dominado por la inflación, sobre todo luego de que el Indec blanqueara -en su nueva medición- que el aumento de los precios llegó al 3,7% en enero pasado. Los gremios calculan ahora que el costo de vida superará el 40% durante todo 2014.

En el caso de los docentes, los sindicatos -desde los más cercanos al kirchnerismo a los identificados con fuerzas de oposición- ya iniciaron conversaciones internas para organizar un paro nacional el próximo 5 de marzo, cuando está previsto el inicio del ciclo lectivo de este año, aunque no descartan que la medida se extienda al menos dos días más si las rondas de paritarias no llegan a buen puerto.

El panorama es tan delicado que el jefe de la CGT oficialista, Antonio Caló, se comprometió con los gremios docentes nucleados en su organización a realizar una gestión directa con la Casa Rosada para tratar de destrabar las negociaciones. Sus aliados piden que el salario mínimo del sector pase a los 5.500 pesos y eso complicaría a varias provincias que tienen el básico en un nivel inferior.

Mientras tanto, en la actividad privada los gremios más importantes ya anticiparon que no acatarán el techo del 25% de aumento que busca fijar el Gobierno nacional en la órbita estatal.

En ese sentido, la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) que lidera el propio Caló reclamará un 30% de incremento en cuotas, más una suma fija como compensación por la inflación.

La misma lógica seguiría desde el gremio de Camioneros el titular de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, quien ayer se reunió con la conducción de la UCR a nivel nacional.

En la sede partidaria de la porteña calle Alsina, el sindicalista y los dirigentes opositores expresaron una “gran preocupación por el efecto de la inflación” en el poder adquisitivo del salario y el empleo.

“La inflación no sólo continúa deteriorando el salario real de los trabajadores, sino que comienza a horadar el nivel de actividad económica llevándonos a una recesión insólita”, afirmaron Moyano y la conducción de la UCR. A su vez, Pablo Michelli (CTA opositora) recibió al líder del FAP, Hermes Binner. Ambos rechazaron el “ajuste” y advirtieron que “la inflación carcome los bolsillos”.

Por su lado, las comisiones internas que no responden a la conducción de sus sindicatos a nivel nacional, en su mayoría enroladas en partidos políticos de izquierda, reclaman aumentos superiores al 40% y anunciaron una marcha a la Casa de Salta en la Capital Federal, donde el próximo lunes está previsto -en principio- un nuevo encuentro de los ministros de Economía provinciales.

Aunque el Gobierno nacional y las provincias de signo oficialista ya coordinaron el techo del 25%, la señal de largada para las paritarias tendrá lugar en forma oficial entre mañana y el viernes, cuando el ministro de Educación, Alberto Sileoni, convocará a los gremios docentes. Entonces los gobernadores alegarán que el objetivo de la Casa Rosada será ponerle un freno a la inflación.